CAPITULO XXI: ENTRE GOLES Y AMORES

CAPITULO XXI: ENTRE GOLES Y AMORES
LIMA, PERU

(* El Pulpo Paul *)

El público se aglomera en la tienda de electrodomésticos “La Confianza” viendo el crucial encuentro entre Alemania Vs. España. Todos están a la expectativa por el vaticinio del pulpo Paul (que predijo que ganaba España) ó el cuy Jimmy (que predijo que ganaba Alemania). A medida que veían el partido, un comentario sale de la mente de los televidentes. 

Cordelia: ¡Si Hitler viera a esta selección alemana, seguro se retumbaría en su tumba! ¡Negros, turcos, nacionalizados! ¿Y donde quedó el argumento de la raza aria, la raza superior, y nacionalismo? 
Lucy: ¡Si, pero, no hay que negar que los alemanes están guapísimos! ¡Ellos son todo un sueño! 
Marina: Más me gustan los españoles… sobretodo Iker, Piqué… ¡Qué pedazos de macizos!
Cordelia: ¡Cuándo no, Marina! ¡Yo sé que a ti te gusta todo lo que venga de España! 
Gustavo: ¡Shhhh! ¡Cállense que no dejan ver el partido! 

En ese momento, en un tiro de esquina, cabecea Puyol del España y… ¡¡¡GOOOOOLLLL!!! Marina es la que grita eufórica por el gol de Puyol. Gustavo y Moncho lucen frustrados por el gol. Moncho: ¡No puedo creerlo! ¡Acertó el “Pulpo”!

(* Cordelia *)

Terminó el partido. Cordelia y Gustavo le ofrecen comidas y cervezas para invitar a los espectadores, que celebran el triunfo de la selección española de fútbol. 

Gustavo: La verdad, España merecía ganar jugó mucho mejor. 
Lucy: Alemania me desilusionó. ¡Pensé que iban a jugar como jugaron contra Argentina! ¡Parecía otro equipo! 
Moncho: ¡Es cierto, Alemania me desconcertó y es que los españoles no los dejaron jugar! 
Cordelia: ¡Oigan! ¡Basta de cháchara y pongan algo de música! 
Gustavo: ¿Qué quieren que ponga? 
Moncho: ¡Cualquier cosa menos el “Waka Waka”! ¡Puaj! ¡Qué asco! 
Lucy: Mi amor, ¿No te gusta el “Waka Waka”, tampoco? 
Moncho: ¡Esa canción es horrible! ¡No pudieron haber elegido otra canción para que sea el himno oficial del Mundial! Entonces, Gustavo coloca un CD y suena una contagiosa melodía:

“Esto se pone bueno, esto se pone caliente, a todos los invito porque al fondo hay sitio.” (“Al Fondo Hay Sitio”, interpretado por Tommy Portugal). 

Entonces, Moncho invita a Lucy a bailar. Ella le guiña el ojo, mientras mueve los hombros y las caderas, al ritmo de la cadenciosa melodía. Moncho está cada vez más enamorado de esa bella mujer.

(* Actuación Especial: Aline Kuppenheim -actríz chilena- como Aline *)

En ese momento, una mujer ingresa a la tienda y se indigna al ver a Lucy bailar con el chico. La chica la reconoce: ¿Mamá? Gustavo mira, con sus propios ojos, como el pasado regresa a su vida, mientras Cordelia comienza a ponerse nerviosa e incómoda. Marina la tranquiliza. 

Mujer: ¡Luciana Estefanía Rojas! ¿Qué estás haciendo? ¿Quién es este muchacho? 
Lucy: ¡Ejem! ¡El es “Moncho”, mi “enamorado”, y solo bailábamos una canción! 
Mujer: ¡Ahora mismo recoge tus cosas y nos regresamos a Chile! 
Lucy: ¡No! ¡Yo quiero quedarme aquí en el Perú, con mi padre y mi “enamorado”! 
Gustavo: ¡Ejem! ¿Aline, eres tú? ¿Qué estás haciendo aquí en Lima?

(* Gustavo *)

Lucy aprovecha que Gustavo habla con su madre para retirarse de la tienda. Moncho corre detrás de la linda muchacha. 

Aline: ¿Gustavo? ¡A los años! ¡Tiempo que no te veía por aquí! ¡Vine a recoger a mi hija!
Gustavo: ¿Por qué no me dijiste que estabas esperando un hijo mío? 
Aline: ¡Perdóname, Gustavo, por no decirte nada! Me gustaba estar aquí, pero, cada día que pasaba es que extrañaba a mi familia, mi gente, mi costumbre. Y quería volver. Sino te dije nada es porque no sabía como ibas a reaccionar. 
Gustavo: Igual lo iba a comprender. 

En ese momento, Cordelia aclara la garganta: “¡Ejem!” Aline comienza a ponerse nerviosa y se incomoda. 

Aline: Perdón, discúlpame, creo que no debo estar aquí. Lo siento. 
Cordelia: No te preocupes. Puedes quedarte aquí. ¿Se te ofrece algo para tomar? ¿Una chica morada? 
Aline: Gracias por la hospitalidad. Yo solo vine a recoger a mi hija y me retiro de aquí. Lo siento. 
Cordelia: Insisto. Quiero mucho a Lucy y su familia es bienvenida. Lo pasado es pasado y hay que vivir el presente, no? 

Gustavo respira hondo de alivio, al ver que finalmente, Cordelia se mostró más tolerante con la madre de Lucy.

(* Actuación Especial: Julián Legaspi como Jorge *)

En ese momento, se aparece Jorge. Cordelia lo recibe amigable, poniendo celoso a Gustavo.

Cordelia: ¡Jorge! ¡Qué milagro que vienes por aquí! ¡Pasa, pasa, y ponte cómodo! ¿Viste el partido? 
Jorge: La verdad, estaba trabajando. Más bien, me gustaría hablar con Marina. 

En ese momento, viene la sensual Marina. El suspira al ver a semejante mujer tan bella. 

Marina: ¡Jorge! ¡Qué sorpresa encontrarte aquí! ¿Cómo estás? 
Jorge: Estoy bien, Marina, ¿Qué tal estuvo el partido? ¿Quién ganó? 
Marina: Estuvo emocionante. Ganó España con gol de “Tarzán” Puyol. 
Jorge: ¡Qué bien! ¡Entonces, la final la jugarán España contra Holanda, una final inédita! ¡Me gusta eso! 
Marina: ¿Se te ofrece algo para tomar? ¿Una gaseosa? ¿Una chichita? ¡Cordelia ha preparado una rica chicha morada! 
Jorge: Pues, habrá que probar la rica chicha morada de Cordelia. 

Los dos se miran fijamente a los ojos sin decirse nada.

(* Marina *)

Mientras tanto, Andoni mira a lo lejos en una esquina como Marina se coquetea con Jorge y se llena de ira e indignación, cuando en ese momento, viene la sensual Mimí. 

Mimí: Mi amor, tranquilízate, debes alegrarte… ¡Ganó España! ¡España está en la Gran Final!

La hermosa mujer lo llena de besos en el cuello, la espalda, él trata de ceder ante sus encantos y logra zafarse y se arma de valor para ingresar a la tienda y hablar con Marina. Pero, ella no quiere sabe nada de él y lo expulsa en la tienda.

(* Moncho *)

Por su parte, en una esquina, Moncho da alcance a Lucy y la abraza para consolarla. 

Lucy: ¡No quiero volver a Chile! ¡Quiero quedarme aquí con Cordelia, con mi padre…! ¡Quiero estar contigo! ¡Te amo! 
Moncho: Es tu madre y se preocupa por ti y te necesita. 
Lucy: ¡No los quiero dejar! ¡Soy feliz aquí! ¡Sufro mucho estar allá! 
Moncho: Lucy, creo que deberías conocer mi historia. Yo soy venezolano, y la idea de venir aquí es porque quería viaja a Chile para conocer a mi media hermana.

(* Lucy *)

Lucy: No sabía que tuvieras una media hermana en Chile. 
Moncho: Ella es hija del primer matrimonio de mi padre. Yo me críe solo, sin hermanos, y de pensar que tenía una hermana, pues, lo primero que hice fue juntar mis ahorros y viajar por Carretera a Chile. Pero, se acabó el dinero, y me dejé tentar por la gente, la comida de aquí que decidí quedarme. Pero, siempre estar en mi mente, viajar a Chile para conocerla. Solo sé que se llama Lena. 
Lucy: Perdón, ¿Dijiste Lena? Pues, así se llama mi vecina, ¿Y si es la misma? 
Moncho: Eso sería una extraña coincidencia. Pero, puede ser. 
Lucy: Entonces, podemos viajar a Chile para que la conozcas, ¿Qué dices? 
Moncho: Yo solo quiero regresar a mi país y ver a mi madre. 

Ella le guiña el ojo mientras que él suspira profundamente por esa preciosa muchacha del cuál se ha enamorado. 

 VUELO DE “AVIANCA”: JOHANNESBURGO – RECIFE, BRASIL – BOGOTA, COLOMBIA.

(* Lena *)

Lena viaja largas horas por avión rumbo hacia Bogotá, Colombia. Marco Aurelio está sentado a su lado. 

Marco Aurelio: Oye Lena, ¿Es verdad que viviste en Venezuela? 
Lena: Es verdad. Mi padre trabajaba en una multinacional y lo transfirieron a allá. Viví por 10 años. 
Marco Aurelio: ¿Y por qué regresaste a Chile? 
Lena: Mi padre tuvo un “affaire”, un romance, con una mujer y ella quedó embarazada. Nació varón. Entonces, él hizo su vida con la madre de su hijo mientras que mi madre, despechada, regresó a Chile conmigo. 
Marco Aurelio: ¿No has pensado conocer a tu medio hermano? 
Lena: Pues, lo he pensado varias veces, pero, no sé si valdrá la pena. 
Marco Aurelio: Vamos, Lena, los hijos no tienen la culpa de los actos de los padres. Además, es tu hermano, ¿Verdad? La sangre llama a la sangre. Por eso, decidí animarme a viajar a Bogotá y conocer a mi tío y su familia. 
Lena: ¿Y como lo ubico? No tengo su dirección. Solo sé que se llama José Ramón, como mi padre. 
Marco Aurelio: Déjalo al destino… después de todo, ¿Quién iba a pensar que nos reencontraríamos en Sudáfrica? 

El acaricia suavemente el bello rostro de la muchacha. Ella sonríe. Se siente más aliviada con sus palabras. 

Mientras tanto, en Bogotá, Colombia, Don Ambrosio se dirige con sus hijas, Paulina y Noelia, al aeropuerto internacional “ElDorado” esperando por el vuelo que llega de Johannesburgo, Sudáfrica. Paulina está esperanzada en poder conocer a sus primos Hurley y Marco Aurelio. Pensar que hace unas semanas solo tenía a su tía como su única familia, y ahora le apareció familia: Padre, hermana, y primos hermanos.

MIAMI, FLORIDA

(* Joanna *)

En el Hotel, Joanna se encuentra en su oficina, haciendo cuenta, mientras cruza sensualmente sus lindas piernas, cuando de pronto, encuentra que los empleados están celebrando muy contentos. ¿Celebran por la Copa Mundial? Decide salir a su oficina para poner órden. Allí está Josh celebrando con los demás. 

Joanna: ¡Qué está pasando aquí! ¿Por qué hacen tanto alboroto? 
Josh: ¡LeBron James anunció que jugará para el “Miami Heat”! ¡Qué emoción! ¡Ahora tendremos un equipazo! 
Joanna: ¡Qué buena noticia! ¡Yo sabía que todo el mundo termina por venir aquí a Miami!

(* Josh *)

Entonces, Josh la sujeta con todas sus fuerzas y le da un apasionado beso a la bella mujer. Pero, viene Darío, y entonces, ellos se separan. Joanna luce contenta con su presencia. Josh no puede ocultar su resentimiento.

Darío: ¡Ejem! ¡No se preocupes, no los voy a molestar! ¡Solo vine para decirles que hoy Viernes en la noche, haré una fiesta de despedida porque regreso la próxima semana a mi país! ¡Y están cordialmente invitados a la fiesta!
Joanna: Bueno, gracias por la invitación. Eres muy gentil. 
Darío: De nada, Joanna. Veo que todo está muy bien con Josh. Los felicito. Hacen linda pareja. 

A propósito, Josh, solo quiero confesarte que nunca tuve nada con Joanna. Lo juro. Sería incapaz de lastimar a esta hermosa mujer. 

Josh: No te preocupes. No te guardo rencor por nada. 
Darío: Bueno, los dejo que quedé encontrarme con Kate. Ella es mi pareja y también viaja a Rumanía conmigo. 
Joanna: Muy bien, felicitaciones. Sabía que Kate era la mujer ideal para ti. 

Darío se retira dejando para reunirse con su amada Kate.



(* Angel *)

En el camino, Darío se encuentra con un extraño personaje. Es Angel. 

Angel: Veo que finalmente sentaste cabeza Darío Dumitrescu, ¿Verdad? 
Darío: ¿Perdón? ¿Lo conozco? ¿Cómo sabe mi nombre? 
Angel: Te he estado observando varias veces y me alegra por ti. Yo fui quién dejó la tarjeta del futbolista.

(* Darío *)

Darío: ¿Verdad? ¿La del jugador en blanco y negro? ¿Y por qué motivo me entregó esa tarjeta? 
Angel: Podría ser cualquier jugador de fútbol. Elegí ese en particular porque es poco conocido y te animaría más a indigar, solo por simple curiosidad. En realidad, el motivo no importa. Solo importa lo que hiciste cuando lo recibiste: ¿No buscaste a Kate para mostrarle tu inquietud? La idea es compartir con la gente que te quiere y aprecia. 
Darío: No entiendo mucho, pero, gracias. Se lo agradezco. 
Angel: A propósito, ¿Quién quieres que gane la Copa Mundial? ¿Holanda ó España? 
Darío: Yo solo quiero estar con Kate. Permiso. 
El chico se retira de la presencia de Angel para reunirse con Kate, el gran amor de su vida

CONTINUARA…

Comments

  1. este si es un angel de la guarda ¡¡yo quiero que él mio sea así ¡¡me encantó¡

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  2. Gracias, la verdad, Sebastián Rulli me inspira con cara de "bonachón", amable, buena gente, por eso, le doy ese tipo de personajes.

    Saludos,

    Renzo

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